Fomentar la lectura? NO!!! Disfrutar leyendo!

¿Cuantos de vosotros no tenéis ganas de ir a dormir por la noche? Tú quieres ser mayor como Papi y mami ¿no?? Sabes qué?? Pues yo también, pero papá no me deja quedarme viendo la tele con mamá y mis hermanos, me dice que tengo que irme a dormir!!! Pero yo no quiero ir a dormir. QUIERO SER MAYOR! Por eso, le digo a papá lo que decís vosotros también.

Papiiiiiiii!!!! 5 minutitos mas porfi!!!!! Pllllliiiiiisss!!!

Pero nada, papá no me deja estar en el salón, y me tengo que ir a la cama, pero cuando estoy en la cama, le digo alguna mentirijilla, a ver si se queda conmigo un ratito.

Papi:

Tengo miedo

Me duele la garganta

Tengo pipi

Tengo sed

Así, empezaría la clase, intentando desconcertar a los “chiquitines” no sabiendo de que les estoy hablando, empezar de una forma diferente a la normal en “casi” todas los coles.

Os ha pasado esto alguna vez? Papá te ha mandado ir a dormir? Seguro que sí, porque incluso a mi me pasa y ya soy algo más grande que vosotros.

Pues sabéis una cosa…. Este cuento lo escribió una niña que le pasaba lo mismo que a todos nosotros!!! No se quería ir a dormir!! 

Con este desconcierto, iniciado, intento que desconecten del mundo, que se sumerjan en una relación entre “él” (cada uno de los niños) y yo, creando así un mundo ficticio en el que solo escuchen las palabras que salen de mi boca

A continuación les leería el titulo e intentaría que comentasen ciertas experiencias de su vida diaria en las que le haya pasado esto o algo parecido, para que vean que entre los cuentos y la realidad, no hay tanta diferencia.

Cada uno contaríamos nuestras experiencias con los fantasmas, el dormir, y lo que pensamos que va a pasar en este cuento.

Después les leería, este cuento, haciendo sugerente mi voz, es decir, dotándola de subidas y bajadas del tono e intentando conseguir que no pierdan la concentración en lo que les estoy contando, ya que una historia contada con un tono monótono y sin moverse incita mucho más al aburrimiento.

Ya que los niños de primero de primaria no tienen sus competencias muy desarrolladas, y ya que creo que perderían el “hilo” de la historia si se cortase, la única “actividad” que realizaríamos seria parar en ciertos puntos del cuento, conservando el mismo tono en el que se cuenta para ver si alguno de ellos se ha perdido en la historia.

El tono , el desconcierto , y la forma de gesticular los considero métodos necesarios por el cual , puedes llegar a desarrollar un interés por los cuentos en niños que aun son mentes “moldeables” es decir , que van a captar todo lo que tu digas y todo lo que hagas , por eso cuanto más le llame la atención más se fijará.

Tras la lectura del cuento, lo que buscaremos en los niños, es que dibujen, una etapa del cuento con la que ellos se hayan sentido identificados, o les haya gustado y así seremos capaces de ver como la han imaginado los niños, y como corren los ríos de imaginación por sus mentes.

Este es un libro que yo leí de pequeño, y que el otro día vi por casa, y me trajo muchos recuerdos, asique por eso he intentado realizar la actividad de este.

Este libro trata situaciones que pueden ser muy comunes para un niño y con las que se pueden identificar perfectamente.

Aunque es un libro que se recomienda a partir de los tres años, creo que esa edad de recomendación se puede seguir alargando, ya que los niños de primero, captaran con mejor claridad la simbolización, y se situaran más en la historia. Así mismo, trata temas fundamentales, como el miedo a los fantasmas, y que uno se debe enfrentar a ellos, y aunque la forma en la que el “padre” se enfrenta de pequeño a los miedos, a mí entender, no es la más adecuada, consigue sacar un punto “cómico” a la situación.